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Marisol González. Resplandeciendo cada mañana

Marisol González. Resplandeciendo cada mañana

Por Pedro Montaño

Marisol González. Resplandeciendo cada mañana

Probablemente la conociste en alguna transmisión de tu equipo favorito y, estamos seguros, llamó fuertemente tu atención desde entonces. Y si te lo perdiste, cada mañana de lunes a viernes, hay una nueva oportunidad de verla –contemplarla- como conductora en el programa matutino Hoy.

Su nombre pocas veces ha sido más justo que ahora –mismo que según varias fuentes, significa “La que brilla”- pues ciertamente, no hace sino eso cada vez que la vemos sonreír en la pantalla. La canción “The sun always shines on tv” de la agrupación noruega A-ha, podríamos dedicársela cada mañana.

Modelo, comentarista deportiva y conductora, Marisol González siempre resplandece.

¿Cuándo estudiabas comunicación, tuviste la oportunidad de trabajar en algún medio?

Marisol González: Fíjate que no terminé la carrera. Solo hice dos semestres porque justo cuando estudiaba me hablaron para concursar en Nuestra Belleza, yo tenía 19 años y se dio la oportunidad y dije, “bueno, hacemos una pausa y vemos que pasa”. Y ese “vemos qué pasa” se convirtió en un gran cambio de planes total y cuando acabó Nuestra Belleza, estudié en el CEA (Centro de Educación Artística de Televisa), y ya nunca paré de trabajar. Desafortunadamente no retomé la carrera, pero se dio de otra forma. Hice muchas cosas de programas a nivel local y participé en secciones. Lo que hice más fue modelaje, a veces el pago era con ropa, pero era algo que a mí me encantaba. Cuando tenía 14 o 15 años, soñaba con ser modelo, y se dio la oportunidad de entrar a Nuestra Belleza.

¿Cómo te diste cuenta que, además de inteligente, eras guapa?

MG: Cuando tenía 14 años, era una niña poco femenina, ruda, me gustaban los deportes extremos, mis amigas hablaron conmigo y me dijeron: “Marisol, eres muy bonita, deberías de ser más femenina”. Y me lo creí, me vi al espejo y dije: “igual y sí me arreglo más”. Empecé a hacer cambios en mi forma de vestir pues antes me vestía súper aguado, como basquetbolista, siempre andaba holgada. En Torreón siempre hace mucho calor, así que la opción para mí era el short. Cuando llegué a Nuestra Belleza, nos pidieron ropa para hacer ejercicio y yo, literalmente, llevé mi short aguado y mis blusas guangas. Y la primera vez que nos llamaron para hacer ejercicio, fue para grabarnos y hacer el Detrás de cámaras. Todas iban espectaculares y yo así, toda preocupada, llamándole a mi mamá para que me mandara ropa. Claro, también ayuda mucho el que seas tú, que seas auténtica, obviamente echarle ganitas y confiar que te ves bien, debes sentirte cómoda e invertir en tu imagen. Mi historia es que gané Nuestra Belleza en septiembre de 2002 y eso me dio la oportunidad de participar en Miss Universo en junio de 2003.

¿A la distancia, qué opinas de los concursos de belleza, ha cambiado tu opinión de ellos?

MG: Lo que a mí me tocó fue muy padre, porque una cosa es lo que tú ves en pantalla y es otra muy diferente todo lo que pasa detrás. Y es muy completo, en México te daban clases de todo, no solo pasarela o maquillaje, sino también psicología, aprendes a conocerte y maduras. Ahora ya no he estado tan pendiente de ellos. Cuando gané, estuve como seis años o más súper pendiente de todos los concursos, pero no creo que haya cambiado mi percepción, ahora no los sigo tan a detalle como en su momento, pero creo que, cuando viviste un concurso de belleza, tu concepto es otro. Sabes todo lo que hay detrás, más allá de lo que se pueda ver de manera superficial el día del evento.

¿Qué cambiarías de los concursos de belleza?

MG: Yo creo que, si vas a un concurso de belleza, hay que dejar huella en lo que haces. Yo cambiaría el perder tu personalidad. Cuando gané Nuestra Belleza, lo disfruté mucho porque era auténtica y lo disfrutaba cada segundo. Cuando me fui a Miss Universo, estaba como en “Pose número 2”, enderézate, sonríe, voltea a la cámara y no, ahí cambié mucho. Yo cambiaría el no hacer tanto caso a una preparación, únicamente tomar lo que en verdad te importa de esa preparación y no dejar nunca de ser tú. Si hubiera sido así, yo hubiera disfrutado Miss Universo y otro hubiera sido el resultado. Recuerdo una pregunta del jurado que preguntaba cómo habían sido esos días, y yo, “Huy, muy cansados”. Claro, si no eres tú y no lo estás disfrutando, te vas a cansar de aparentar lo que no eres. Y siendo tú, se disfruta, se goza y automáticamente se refleja eso. Es lo que yo cambiaría.

En tu opinión, una mujer que participe en estos certámenes ¿qué tanto puede modificar su físico con cirugía? ¿o debe de ser natural?

MG: No, yo creo que, si algo requieres ¿por qué no mejorarlo? Sobre todo, te tienes que sentir cómoda, y no solo es lo físico, influye mucho en tu interior. Si alguien quiere hacerse un arreglo, adelante, sin caer en el exceso, con que te haga sentir bien, claro. También es aprender a quererte y darte tu manita de gato, obviamente, un concurso tiene una percepción de belleza.

Marisol González. Resplandeciendo cada mañana

¿Qué piensas del acoso y de la violencia hacia la mujer, lo has sufrido?

MG: No, afortunadamente no me ha tocado. Es un tema muy delicado que se tiene que manejar con mucho respeto. Es opinar solo si es de primera mano, porque debes de ser muy cuidadoso al respecto.

¿Crees que hace falta protección, leyes y cuidados para las mujeres?

MG: Claro, es un tema en el que siempre se debe poner atención y esperamos que sea cada vez menos el índice de violencia hacia las mujeres, hasta que la mujer ya no padezca eso. Se me hace muy alarmante, más como mamá, pues tengo hijas. En mi caso, debo estar al 100%, lo más que se pueda, pendiente de ellas.

Te contagiaste de Covid a inicios de este año, ¿qué opinas de personas, como Miguel Bosé, quien dice que las vacunas son una herramienta de control mental?

MG: Híjole, yo soy totalmente lo opuesto. Desde el inicio traté a la enfermedad con muchísimo respeto, incluso me daba mucho miedo ir a trabajar. Poco a poco fuimos aprendiendo cómo lo puedes evitar y los cuidados. Yo muero de ganas de que me apliquen la vacuna, mis papás ya están vacunados y es algo que me tranquiliza mucho. Es un tema que debemos respetar, en mi caso perdí a un ser muy querido, no hay que dejar de cuidarnos. Si él opina eso, y los que están opinando igual en este tema, no deberían de dejar de cuidarse.

Si a tu esposo le pidieran que te describiera, ¿qué diría?

MG: Mmm… yo creo que diría que soy muy aprehensiva, muy cariñosa y que siempre me preocupo por los demás.

¿Qué valoras y aprecias en un hombre?

MG: Yo valoro de mi esposo muchas cosas, el gran papá que es y cómo sabe hacer equipo. En esta pandemia que estuvimos encerrados, aprendimos a convivir más tiempo, porque antes con el trabajo nos veíamos, pero no todo el día. Ahora nos sirvió mucho como familia. Si algo nos ha enseñado esta pandemia, es a adaptarnos. Yo agradezco tener un esposo como el que tengo, agradezco que sabemos respetar nuestros tiempos en casa. Ahora estoy más enamorada que cuando éramos novios, pero con retos que hemos enfrentado juntos. Me doy cuenta que fue la mejor decisión, haberme casado con él. Una de las decisiones más difíciles es con quien te vas casar, yo estoy súper feliz con mi pareja.

¿Te consideras una persona que busca o gusta de tener una pareja o podrías estar sin ella?

MG: No, yo si prefiero compartir mi vida con una pareja. Imagínate en este encierro haber estado soltera y sola, no gracias. Pero no es tener una pareja solo para no estar sola, también es encontrar a una persona que te complemente y que sume a tu vida, es la mejor decisión que puedes hacer.

Yo te noto una mujer muy fuerte y segura, ¿haz lidiado en algún momento con algún problema de inseguridad?

MG: Sí, claro. En los concursos fue algo que me pasaba. Me hice súper insegura en ese momento porque quería aparentar mucho o que todo me saliera perfecto. Y realmente, hay que aprender a disfrutar lo que se tiene, a no ser tan intensa en las cosas. Fue algo que me llegó a costar mucho trabajo, pero poco a poco vas madurando.

 

¿En algún momento te has sentido agredida en las redes sociales?

MG: En su momento, cuando estaba soltera, de repente sí, había más notas o comentarios negativos. La verdad es que tiene mucho tiempo que no me toca lidiar con esas cosas. Si las personas que tienes a tu alrededor, tu familia y personas cercanas, saben cómo eres y cómo son las cosas, no tiene caso estar enganchándote.

Actualmente, ¿Cuál sería tu sueño profesional?

MG: Hoy te puedo decir que mi mayor sueño es ver a mis hijas felices, el poder ser una buena esposa, madre, el seguir unida a mi familia, que es mi pilar. Gracias a Dios, en el trabajo he cumplido muchos sueños y ahora le toca más a mi vida personal. Sin duda, uno de mis sueños era estar en el programa Hoy, que afortunadamente se dio y ahora quiero darle más prioridad a mi familia.

¿Regresarías a hacer algo de actuación?

MG: Tal vez en cosas chiquitas. Hace poco hice una participación pequeña con Arath de la Torre, cositas así. Más allá de eso, no es algo que me encante, no es algo que disfrute tanto, prefiero la conducción, siento que es algo que disfruto más.

 

¿Cuáles son los temas que te llaman la atención, sobre qué tema podrías hablar por horas?

MG: Los temas de mamá. Me atrapan mucho los temas de maternidad, comportamiento, el cómo ayudar a mis hijas, alimentación. La mayoría de mis amigas son mamás y casi siempre nuestros temas son de casa, no es como que me enganche en algo en especial.

¿Te siguen gustando los deportes?

MG: Me encantan. Fíjate que en Torreón, al ser una ciudad pequeña, el entretenimiento siempre fue ir a ver al Santos. Mi papá es santista de hueso colorado, es más, hasta verde. En el carro tenía sus banderas, súper apasionado, era de que nos llevaba siempre al estadio, es algo que sigo disfrutando mucho y más con mi esposo que es comentarista. El futbol siempre está en casa, me gusta también el box, es lo que más me gusta ver. Tal vez el que menos disfruto o tengo menos interés, es el béisbol.

(Fragmento del artículo publicado en POST Mag edición Mayo 2021).

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